sábado, 2 de julio de 2016

Ideas virales: el sistema de pensiones es un esquema piramidal

Algunos pensadores equiparan las ideas con los virus. Una persona escucha una idea, por alguna razón le da validez sin llegar a analizarla, la transmite a varias personas que siguen el mismo proceso y así hasta que todo el mundo está convencido de la validez de una idea estúpida.
La mayor parte de las ideas de este estilo se encuentran en el ámbito del seudo-progresismo: la infalibilidad y omnipotencia del gobierno, la generación de bienestar pagando 120 euros de impuestos para recibir una subvención de 100, el papel mágico de las leyes para resolver problemas, etc. Estas ideas se remachan continuamente en prácticamente todos los medios de comunicación y quedan grabadas para siempre en el imaginario popular. Se añaden sin ningún pudor al curriculum de la enseñanza básica e incluso a los cursos de formación de profesorado universitario. Sin embargo, hoy me toca rebatir una idea viral perteneciente al ámbito del seudo-liberalismo.
Un amigo me envía esta viñeta de humor gráfico en que se compara el sistema de pensiones de reparto en vigor en España con una estafa piramidal.



En primer lugar, debo felicitar a mi amigo por sus importantes contribuciones (3) al sostenimiento del sistema de pensiones de reparto a veinte años vista.


Como soy una persona muy austera voy a fundar el hedge fund Bierzopeleon con el objetivo de obtener un millón de euros para mis gastos más perentorios. Emitiré 1,000 bonos de 1000 euros con un rendimiento de 100 euros al mes para siempre. Es decir, al que me compre 10 de estos bonos le convertiré en mileurista para siempre por una cantidad moderada que cualquier banco podría prestarle. El millón de euros obtenido inicialmente con la emisión es el justo pago a mi pericia financiera y lo pongo a buen recaudo.
Al cumplirse el primer mes de vida de mi fondo necesito 100,000 euros (1000 inversores por 100 euros) para pagar los intereses. Para ello emito, 100 nuevos bonos de 1,000 euros con lo que ya tengo 1,100 inversores. El segundo mes necesito 110,000 euros para pagar los intereses (1,100 inversores por 100 euros) que consigo emitiendo 110 nuevos bonos. Por tanto, el número de bonos necesarios para mantener Bierzopeleón en marcha crece a una tasa mensual del 10 por ciento. Es decir, el número de nuevos inversores necesarios para mantener el fondo en marcha se duplica aproximadamente cada siete meses (*).
La necesidad creciente de emitir el doble de bonos cada siete meses puede hacer que los inversores empiecen a sospechar sobre el fondo, que un número sustancial de clientes pidan su dinero y todo se venga abajo. Todo esto es demasiado evidente y nadie caería en la trampa de Bierzopeleon. Sin embargo, yo veo un caso mucho más inquietante: que el fondo prometa 100 euros al año en vez de al mes. En este caso, pasarían siete años antes de que se duplicase el número total de bonos emitidos. Por tanto, esta estafa tiene muchas posibilidades de pasar desapercibida y aquí llega mi inquietud ¿Cuántas estafas piramidales de baja intensidad indetectadas existen en nuestra economía?

El sistema de pensiones de reparto.
La diferencia más importante para nosotros es que el sistema de reparto puede funcionar en una población estable indefinidamente y el esquema piramidal no.
Imaginad un mundo donde la gente vive dos periodos de igual duración (**). En el primer periodo trabajan y en el segundo cobran una pensión. Por otra parte, hay el mismo número de personas en cada periodo. En esta economía, se le puede pagar una pensión equivalente al 50% del salario de los trabajadores a los pensionistas cobrando un impuesto del 50% sobre el salario. Por otra parte, se pueden subir o bajar las pensiones subiendo o bajando los impuestos. Incluso si en un momento dado se redujese el número de trabajadores el sistema podría seguir adelante modificando la cuantía de las pensiones, los impuestos o la definición de pensionista. En definitiva, uno puede discrepar sobre la cuantía de la pensión, sobre los impuestos o sobre el momento en que aparece el derecho a ser pensionista pero no sobre su sostenibilidad.
El esquema piramidal descrito anteriormente es explosivo independientemente de las características demográficas de la población sobre la que se instale. En el sistema piramidal la contribución da derecho a la prestación inmediata e indefinida y, en el peor de los casos, se puede tratar de obtener la devolución del principal. En el sistema de pensiones de reparto la prestación no es inmediata pero, sobretodo, no es indefinida ni se puede pedir ninguna devolución. Las prestaciones tienen un límite temporal (muerte) y por tanto el gasto total no se acumula exponencialmente. Simplemente, crecen o decrecen por la evolución demográfica (***). De hecho, la única manera que se me ocurre para acercar el sistema de pensiones a un esquema piramidal es convertirnos en inmortales (alternativamente, que se puedan heredar las pensiones) sin modificar la edad de jubilación.


(*) Este es el tipo de razonamiento de la primera clase de Crecimiento Económico (matemáticas básicas del crecimiento).

Un caso equivalente...puedes convertir 1 Euro en 2 Euros si eres capaz de realizar doce operaciones financieras, con el euro y los intereses generados en cada operación ,sacando en cada una de ellas un 10% de rentabilidad.

(**) Esta manera de pensar está tomada del modelo de generaciones solapadas que se usa en cursos avanzados de macroeconomía.

(***) El análisis con lápiz y papel de la estabilidad del sistema me ha llevado a usar fórmulas del tipo yt=y0exp(rt) donde
y0 es el valor inicial de una variable, yt es el valor en el momento t, t es el periodo analizado, r puede ser la tasa de crecimiento de la población, la participación laboral, de los pensionistas, la tasa de mortalidad y, sobre todo, de la productividad.

lunes, 13 de julio de 2015

miércoles, 10 de junio de 2015

martes, 2 de junio de 2015

Terminator: El juicio final


Comic-Con 2004 - Terminator statue.jpgEn el año 2029, después de devastar la tierra y esclavizar a la humanidad, las máquinas, gobernadas por la inteligencia artificial conocida como Skynet, están a punto de perder la guerra contra la resistencia humana liderada por John Connor.

 Frente a esa situación, las máquinas entienden que asesinar a John Connor en el presente, sería irrelevante, dado que ya ha conducido a la resistencia humana del mundo entero a la victoria. Por lo tanto, Skynet elabora su estrategia decidiendo eliminar al líder enemigo antes de que éste nazca, de modo que no pueda cumplirse su misión de conducción futura.

 Para ello envía al pasado (año 1984) a un Terminator T-800 modelo Cyberdyne 101, un ciborg asesino  (Arnold Schwarzenegger), a través de una maquina del tiempo, con la misión de exterminar a Sarah Connor (Linda Hamilton), madre de John, antes de que éste sea concebido.

Enterados del plan para asesinar a la mujer que dará a luz al único hombre capaz de salvar a la humanidad, la resistencia también consigue acceder a la máquina del tiempo y logra enviar a un soldado humano, Kyle Reese (Michael Biehn), con la misión de protegerla del Exterminador (Terminator).
De vez en cuando alguien desenpolva los antiguos temores de los hombres y, al igual que John Connor en la pelicula, se erige como nuevo salvador de la "amenaza industrial".
Es el caso del histórico o, tal vez legendario capitán Ludd, que dio nombre a los luditas, destructores de máquinas que pensaban en la incipiente revolución industrial que la tecnología era la causa del paro, y regresan de vez en cuando con sus desatinos, que, por cierto, ya refutó David Ricardo en la edición de sus Principios en 1821. De esta manera el catedrático del Instituto de Robótica de la Universidad de Valencia Gregorio Martin Quetglas, , aventura que la informatización destruirá más empleos de los que creará, y subraya la necesidad de "administrar racional y democráticamente el trabajo, un bien escaso".
Si el avance tecnólogico suprimiera puestos de trabajo… ya habrían desaparecido todos. De la misma forma que desaparecio el pajaro Dodo de las islas Mauricio en 1681 cuando atracarón alli los  los recien llegados europeos.
Si en vez de ser así hay muchos más empleos hoy que antes de la revolución industrial, habiendo sido el avance tecnólogico incesante y generalizado, es porque David Ricardo y los clásicos tenían razón cuando sostuvieron que la tecnología impulsa la productividad, la riqueza y por tanto, el empleo.
Como siempre ha sido así, los que vuelven con la babarrasada tienen que decir que ahora no......., ahora va a ser diferente, y el juicio final es inminente. Lo dice el profesor Quetglas, pero no lo prueba. Lo que sí queda en evidencia es su capacidad de repetir mantras, como eso de que el trabajo es un bien escaso, como si eso significara que los partidos políticos de turno debieran decidir cómo repartirlo…democráticamente, cómo no. 
No parece habersele ocurrido que la creatividad humana, la fuente básica de la riqueza y el empleo, no escasea; y tampoco se le ha ocurrido pensar que la coacción política y legislativa, tantas veces sustentada en los democráticos valores, sí puede recortar el empleo, como bien sabemos en España. El disparate del reparto del trabajo, al que también se apunta el profesor, no abre "un arduo debate político", sino la lúgubre posibilidad de una intromisión aún mayor en el llamado mercado de trabajo, con el consiguiente efecto negativo sobre el empleo.
En lo que tampoco se calla el catedrático es en apuntarse al ya anticuado rechazo al comercio: "Desaparece la intermediación, y con ella centenares de miles de puestos de trabajo". Cree ingenuamente que el self service y el comercio electrónico atacan el empleo. Salvese quien pueda. Nos asedía la prole intelectual de Ludd.


martes, 31 de marzo de 2015

La cláusula Van Halen


El grupo Van Halen tenía fama por incorporar una cláusula particular en sus contratos, en el backstage tenía que haber un bol lleno de Emanents(M&Ms) con los M&Ms marrones retirados.

Si no se cumplía esa cláusula del contrato, podían dejar de actuar y cobrar por ello. Los rumores es que si esta cláusula no se cumplía, habían llegado a provocar destrozos con su ira. ¿Qué había detrás de este rumor?

La verdad es que es cierto, Van Halen ponía esa cláusula de M&Ms en sus contratos, si había M&Ms marrones podían cancelar el concierto cuando les diera la gana y aún así cobrar por el mismo. Pero detrás de esa cláusula aparentemente muy caprichosa, había un inteligente razonamiento de un buen gestor digno de ser estudiado en escuelas de negocios para gente con corbata, a pesar de ser inventada por melenudos de ropa de dudoso gusto.
Van Halen era el primer grupo que hacía grandes producciones. Cuando estaban en tour llevaban nueve camiones de dieciocho ruedas hasta arriba, cuando lo normal es que fueran tan sólo tres para otros grupos. El contrato que hacían por tanto era excesivamente técnico, con un montón de especificaciones, así que decidieron introducir esta cláusula como modo de testear que todo estuviera bien, número de enchufes, potencia de los mismos, peso que podía aguantar el escenario…

En medio del contrato sin mucho sentido se ponía que si hubiera un solo M&M marrón en el backstage, la pena era la cancelación del show sin compensación por parte del grupo. Así que nada más llegar lo único que había que hacer era mirar si había M&Ms marrones en el escenario, si los habia, es que las demás condiciones técnicas no se habían leído con detalle y era seguro que habría problemas.
Si lo pensamos, introducir una cláusula de este estilo en ciertos contratos puede ser una forma de tener una forma rápida y sencilla de chequear ciertos aspectos técnicos, sin problema alguno.
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